El Hospital Garrahan vivió horas convulsionadas luego de que organizaciones sindicales tomen las oficinas del directorio y se dirijan de manera violenta teniendo enfrentamientos con los médicos del nosocomio.
Según informaron desde la entidad, el motivo de la inserción de los dirigentes sindicales fue “porque el Consejo de Administración aplicó descuentos por días no trabajados durante los paros recientes”.
Habló Lugones tras los enfrentamientos
Luego de que se desarrollen los acontecimientos, Mario Lugones, ministro de salud, emitió un contundente comunicado en redes sociales, repudiando el accionar de los involucrados.
“No vamos a permitir que la casta sindical ni los grupos violentos vuelvan a poner sus intereses por encima de los chicos. Para nosotros es claro: el que para no cobra, por eso quienes pararon 9 veces el último mes tuvieron descuentos en sus haberes” comenzó señalando el encargado de la cartera de salud.
Además, agregó: “Queremos que el Garrahan sea el hospital pediátrico de referencia de toda América Latina, libre de quienes lo usaron como bandera política para su propio beneficio. Es tan claro que lo usan políticamente, que hacen esta medida justo el día que el gobierno aumentó el presupuesto del hospital en $20 mil millones”.
“Cada peso que antes se malgastaba, hoy se invierte en su equipo de salud, en tecnología y en obras. El hospital tiene las cuentas en orden y los recursos van a donde deben ir, a los que trabajan y a los pacientes. El Garrahan es de los chicos y sus familias, no de quienes lo utilizan únicamente para mantener sus privilegios y hacer política” finaliza el mismo.
El comunicado del Hospital Garrahan
“El problema es político: un sector de la izquierda intenta imponer sus intereses partidarios dentro del hospital, poniendo en riesgo la atención de miles de chicos. No vamos a permitir que prácticas de presión, violencia y apriete gremial se conviertan en método de funcionamiento” señalaron desde el hospital.
En este sentido, continuaron: “El Hospital Garrahan es una institución al servicio de los niños y sus familias. No es un espacio de militancia ni un botín gremial. Vamos a seguir defendiendo su misión, su prestigio, al equipo médico y, sobre todo, la atención de los pacientes”.






