El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, reiteró su convicción de lograr una “victoria” total en Oriente Medio, en un momento en el que el Ejército combate en distintos frentes y ocupa territorios en países como Líbano o Siria, durante la toma de posesión del nuevo jefe del Estado Mayor del Ejército israelí, Eyal Zamir.
En el acto, Netanyahu afirmó que Israel está decidido a «lograr el éxito y la victoria» en los «siete frentes» que tiene abiertos, en referencia a los conflictos contra las milicias palestinas en Gaza y Cisjordania, Hizbulá en Líbano, las milicias proiraníes de Siria (si bien las autoridades israelíes aseguran ahora desconfiar también de su nuevo gobierno), la Resistencia Islámica de Irak, los hutíes de Yemen y el régimen de Irán.
“La Guerra de Renacimiento”
“Con el apoyo de nuestros amigos de Estados Unidos, encabezados por el presidente (Donald) Trump, estamos trayendo a Israel armamento muy poderoso y esencial para nuestra seguridad“, añadió Netanyahu en la ceremonia, que contó con la presencia del general Michael Kurilla, al mando del Comando Central de Estados Unidos, según cuenta la agencia EFE.
Netanyahu detalló cuales son los objetivos de guerra de Israel en Gaza: eliminar las capacidades militares y de gobierno de Hamás, hacer que la Franja no pueda constituir una amenaza y recuperar a los rehenes que siguen en el enclave y devolver a los desplazados por la guerra, tanto junto a la frontera con Gaza como a la del norte con Líbano, a sus hogares.
“Ante las ramas terroristas de Irán, que como Irán tienen la destrucción por bandera, ¡estamos decididos a lograr una victoria decisiva!», dijo.






