Como parte de las medidas de transformación anunciadas globalmente por Nissan Motor Corp., la compañía ha anunciado cambios estratégicos en sus operaciones industriales en América Latina y decidió dejar de producir en la Argentina, a partir de enero del año próximo.
“América Latina es una región clave para el negocio de Nissan, representando el 15 % de las ventas globales de la compañía y el 25% de su producción a nivel mundial. En el año calendario 2024, Nissan América Latina vendió 426,000 unidades, lo que representa un incremento del 6% frente al volumen de 2023, y seguimos enfocados en el crecimiento a largo plazo,” afirmó Guy Rodríguez, presidente de Nissan América Latina.
A partir de enero de 2026, Nissan América Latina consolidará la producción de las pickups Nissan Frontier/Nissan Navara, actualmente dividida entre México y Argentina, en un único centro de producción regional, centralizado en la planta CIVAC, en Morelos, México. Esta planta, que opera con dos líneas de producción, se enfocará en la fabricación de pickups en la Línea C2, mientras que la Línea C1 – anteriormente utilizada para la fabricación de un volumen adicional temporal de vehículos de pasajeros, como se anunció previamente — concluirá esta actividad en el último trimestre de 2025, tras superar el objetivo de producción temporal inicial de este proyecto en más de un 30%.
Según informó la empresa, la subsidiaria de Nissan en Argentina enfocará sus esfuerzos en las operaciones comerciales. La compañía seguirá brindando “soporte y servicio a sus clientes, incluyendo los más recientes lanzamientos de la marca”.
Lo cierto, es que por los altos costos de producción que significa continuar en el país, Nissan América Latina decide dejar de producir en el país, y sostendrá sus operaciones de manufactura a través de las plantas de Aguascalientes (A1, A2 y planta de motores Powertrain) y la planta CIVAC C2 en Morelos, México, así como la planta de Resende en Río de Janeiro, Brasil, donde próximamente se lanzarán dos nuevos SUVs. Las cinco plantas continuarán operando con normalidad, entregando calidad de manufactura de clase mundial, reconocida por los clientes en toda América Latina y en los 70 mercados a los que Nissan exporta sus vehículos.






