El Papa León XIV recibió en El Vaticano a los presidentes de Brasil y Chile, Luiz Inácio Lula da Silva y Gabriel Boric. Con cada uno sostuvo una reunión por separado. Ambos mandatarios, eso sí, recalcaron su cercanía con el Pontífice.
“Fue un encuentro maravilloso por la gran química entre los dos”, dijo Lula. “Como si estuviera hablando con alguien a quien conozco desde hace veinte años”.
Coincidieron en fortalecer planes para combatir el hambre y la pobreza.
Boric, en tanto, se describió como alguien que “no es hombre de fe”, no obstante, reconoció la importancia de la reunión. “Me siento convocado con estar al servicio de los más desposeídos, vulnerables y pobres en todas las dimensiones”. Otro punto que abordaron fue la importancia de los derechos humanos.