El presidente de la Nación, Alberto Fernández, no se refirió al asesinato de Morena Domínguez, la nena de 11 años de edad que perdió la vida a balazos cuando fue asaltada de camino a su escuela en Lanús.
Fernández no hizo declaraciones públicas ni emitió algún comunicado. Tampoco posteó en redes sociales, un espacio que en los últimos días aprovechó para recibir preguntas de seguidores y defender su gestión.
Casa Rosada, hasta ahora, no fijó posición. Ni siquiera para manifestar repudio por el acontecimiento.
“La situación es muy delicada, no se puede hablar con livianidad. No sirve hablar para no decir nada”, respondió una alta fuente del gobierno, citada por la agencia Noticias Argentinas.
La actitud del Presidente, eso sí, contrasta con las de Axel Kicillof, gobernador de la provincia de Buenos Aires, y de Sergio Berni, su ministro de Seguridad. Ambos, por separado, lamentaron el hecho y enviaron sus condolencias a familiares.
Cristina Kirchner, vicepresidenta de la Nación, actuó igual que Fernández: no dijo ni posteó nada.
