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¿Y ahora Mauricio? ¿Qué hacemos?

“Martín dice que tiene los votos para reelegir, pero con el kilombo que hay, yo no descartaría nada”, dice un diputado de La Libertad Avanza que está contando los legisladores que se necesitan el próximo miércoles a las 14, cuando haya que renovar las autoridades de la Cámara.

Será el bloque de La Libertad Avanza quien propondrá de nuevo la reelección del riojano, quien fue sostenido a “capa y espada”, durante su errático primer mandato por la Secretaria General de la Presidencia, Karina Milei.

Hasta el viernes pasado, antes que se produzca el cruce de comunicados entre el PRO y el oficialismo, el bloque conducido por Cristian Ritondo, iba a apoyar a regañadientes la reelección.

Pero todo cambió, luego del claro pacto que hubo entre La Libertad Avanza y Unión por la Patria, que cambiaron el proyecto de Ficha Limpia por mantener la presidencia.

En el combo, no estaba eso solo. Wado de Pedro y Santiago Caputo negociaron mucho mas de lo que se conoce. También el operador político del peronismo, el heredero del “chueco” Mazzón, Juan Manuel Olmos (titular de la Auditoría General de la Nación), y el viceministro de Justicia, que es quien conduce la cartera, Sebastián Amiero, hombre de Santiago Caputo.

Macri se sintió traicionado por el presidente Milei, y mandó a publicar un mensaje sin lugar a equivocaciones.

“Mientras los Diputados del PRO cumplieron con el mandato que nos dieron nuestros votantes, el Gobierno decidió estar del otro lado. Tenemos una enorme responsabilidad institucional que honraremos. No vamos a callar cuando se juega a favor de los corruptos”.

El gobierno tardó tres horas para hacer que todo estallara en mil pedazos.

“Es repugnante el oportunismo como herramienta de acción política. Utilizar la vara suiza en la gestión ajena pero no en la propia es por lo menos llamativo; pero no vamos a permitir que salden frustraciones del pasado con un proyecto hecho a medida para que gobernadores feudales hagan abuso de su influencia en la justicia y proscriban a sus opositores”, respondió el gobierno.

Santiago Caputo no sólo mintió en el comunicado diciendo que “cabe recordar que durante el gobierno de Mauricio Macri no se trató ningún proyecto de “Ficha Limpia”, sino que además dijo que “desde su concepción fue un proyecto sin consenso y destinado al fracaso”.

Dos temas. El primero, es que el PRO presentó el proyecto, hubo dictamen en 2017 y se trató de llevar al recinto en 2019 pero no hubo quórum.

Pero además, el 21/11/2019 cuando se llevó a discusión el tema en la Cámara, hubo 147 ausentes que no dieron quórum.

En segundo término, un diputado del macrismo se preguntaba: “Para qué pidieron dos sesiones consecutivas, junto con el PRO, ¿si el proyecto estaba destinado al fracaso? Lo hubieran negociado en comisión”.

El proyecto de ley fue firmado por Bornoroni y Mayoraz, que son presidentes de las comisiones. 11 diputados de La Libertad Avanza firmaron el dictamen de comisión.

“Dijeron que iban a apoyar ficha limpia. Se comprometieron ante Silvia Lospennato con poner 38 diputados a las 12 de la noche del día anterior, y al otro día hacen caer la sesión con 8 que no van. Dejaron como inútiles a los que firmaron. En minoría, nadie dijo que habría que modificar algo. No cierra por ningún lado. El problema es político. No hay un relato coherente a la salida”, afirmó un diputado aliado.

El asesor presidencial dio la orden a toda la comunidad digital. Salieron como locos a explicar lo inexplicable y dijeron que si en Brasil o en EEUU hubiese Ficha Limpia, ni Bolsonaro ni Trump podrían estar en el poder.

A priori lo de Trump no es así, porque la condena es en primera instancia, pero nada importa. Las fake news pasan como si nada. Nadie chequea nada. El periodismo es molesto porque tiene sustento.

El acuerdo con el kirchnerismo es mas amplio. Designación de 150 jueces, Auditoría General de la Nación y Corte Suprema de Justicia. Pura Casta. Aunque no les guste.

Francos y Patricia Bullrich trataron de explicar que no podían apoyar una ley para creer que se proscribía a alguien. A Cristina Fernández de Kirchner. Que por eso la iban a perfeccionar y volver a presentar.

Por ahora, el “criadero de fanáticos”, como en su momento tuvo el kirchnerismo, se mantiene inalterable. “El acomodamiento de la inflación, te da dos años de plazo. Eso le va a permitir llegar a las elecciones. Con eso, Milei Milei va por la reelección, porque va a tener un congreso que sea una nueva escribanía”, dice uno de los armadores de La Libertad Avanza de la Provincia de Buenos Aires.

Los votos prestados, se siguen sosteniendo por el gran presente de la macroeconomía y por la batalla ganada a la inflación. Pero se comienzan a hacer preguntas. Ojo con cegarse con el poder.

No solo por el carácter republicano de algunas decisiones, sino porque la micro economía aún no despega.

Este gobierno admira al menemismo. Carlos Menem era la esencia de la Casta. Los acuerdos, las componendas políticas, la mayoría automática. Fue el gobierno que más casos de corrupción tuvo en la historia argentina. Mucho mas que el kirchnerismo.

Por ahora a Milei le alcanza y le sobra con el gran trabajo que está haciendo en la macro, en el reordenamiento del orden público, y con las desregulaciones que tienen programadas realizar semanalmente, para mantener viva la llama.

El desquicio en que se había convertido el Estado, le provee al gobierno, material suficiente para seguir ganando la batalla cultural.

Y es que a Milei le va bien, a pesar de lo que hace. Ahora, los nuevos enemigos son Macri y la Unión Industrial Argentina.

El presidente de la Conferencia Industrial, Martín Rappallini, había dicho que “los industriales, no hemos tenido, no tenemos ni pedimos privilegios. No pedimos protección, queremos igualdad de condiciones para poder competir”.

Y aclaró: “Es ante la falta de igualdad que necesitamos una defensa, defensa del ataque de países que subsidian la producción, los insumos y las exportaciones. Países y sistemas que no cumplen con las reglas de comercio internacional establecidas”.

Eso es el Trumpismo, todo lo contrario que pregona Milei. El quiebre ya fue hecho. Los industriales son los enemigos. El campo es el amigo. El gobierno elige aliarse con los enemigos del kirchnerismo y se enfrenta con los cercanos. Es kirchnerismo de derecha. Lo mismo, pero para el otro lado. Los extremos pactando. No se puede diseñar una política donde los buenos gobiernan. Volvió a ganar, como Dice Alejandro Borenstein, el Club de los Malos.

El gobierno pretende quedar solo en la cancha frente al Kirchnerismo. Necesitan mantener competitiva a Cristina Kirchner para jugar en las elecciones.

Un hombre de consulta permanente del ex presidente, lo escuchó decir: “Ya está, vienen contra mí”. La certeza se confirmó. Quieren sacar las Paso. Van a hacer competir al PRO contra La Libertad Avanza en la Ciudad de Buenos Aires. Los afiches ya salieron. Milei-Adorni. Milei es Karina. Y aunque la versión no sería la que prime a la hora de la competencia, la idea de un partido mano a mano entre “El Javo” y Mauricio, despierta el morbo de unos cuantos.

Volviendo a Lijo, ya consiguió las firmas para el dictamen, aunque le avisó a la Casa Rosada que no aceptará asumir designado en comisión.

Con la carta que le hizo llegar José Mayans, presidente de bloque de senadores a Guillermo Francos, con las 33 firmas de los integrantes de bloques del peronismo, en donde dice que rechazarán cualquier nombramiento en comisión de los jueces para la Corte, el presidente cree que volvería pronto a su juzgado. Lijo tendría acordado con el peronismo la votación.

El presidente sabe igual que a partir de diciembre, con la partida de Maqueda, la Corte se paralizaría porque se necesitan tres votos para cualquier resolución, y el máximo tribunal estría integrado por Horacio Rossatti (presidente), Carlos Rosenkrantz, y Ricardo Lorenzetti.  Lorenzetti vota distinto de Rosenkratz y Rosatti.

Con la llegada de Lijo y García Mansilla, el gobierno tendría el número para asegurarse los votos en el Máximo tribunal. Lijo tiene las 9 firmas que se necesitan en la comisión. El acuerdo no solo fue con Cristina. También con los gobernadores.

 

 

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