La cocaína incautada tiene un valor estimado de 80 millones de dólares australianos en el mercado internacional de drogas. Las autoridades argentinas han abierto una investigación penal preparatoria en colaboración con sus homólogos australianos para esclarecer los detalles de este importante decomiso y rastrear a los responsables.
La modalidad de ocultamiento de la droga en la “caja de mar” sugiere que la operación contó con la participación de buzos tácticos altamente entrenados. Además, se sospecha que organizaciones criminales brasileñas podrían estar involucradas en esta operación internacional de tráfico de drogas.
El buque involucrado, el Chemstar Sapphire, realizó una escala en varios puertos argentinos, incluyendo San Lorenzo, Campana y Quequén, antes de continuar su viaje hacia Australia.
Este último caso se suma a otro secuestro de 900 kilos de cocaína en un buque que había pasado por puertos argentinos en junio pasado, lo que ha llevado a los investigadores a explorar la posibilidad de que la carga haya sido “contaminada” en alguno de los puertos de Argentina o que la operación de embarque de la cocaína se haya realizado en alta mar.