Entró en vigencia la Ley de Cardiopatías Congénitas, tras ser publicada en el Boletín Oficial.
Uno de los objetivos de esta norma es que las mujeres embarazadas tengan garantizado un chequeo para detectar lo más temprano posible si sus bebés padecen alguna patología.
A su vez se busca que todas las personas, cualquiera sea su edad, tengan instancias de detección y tratamiento.
En abril, cuando se votó la ley en el Congreso, los libertarios Javier Milei y Victoria Villarruel se manifestaron en contra por considerarlo un gasto del Estado.