Los aliados están desconcertados. No saben como van a actuar en el recinto cuando el próximo martes a las 15, suene la chicharra para debatir la reforma de la ley que regula los Decretos de Necesidad y Urgencia y el decreto de necesidad y urgencia 846/24.
El decreto 846, habilita al gobierno por DNU, a realizar canjes para títulos en cualquier moneda, sin los requisitos de la Ley de Administración Financiera y sin pasar por el Congreso.
¿Cómo se podría hacer esto? Eliminando el cumplimiento del artículo 65 de la Ley de Administración Financiera (LAF), es decir, aquellos requisitos que implican mejorar monto, tasa o plazo. Ponen como único criterio que al gobierno le tomen a precio de mercado los bonos a canjear, lo cual es demasiado flexible.
Esto implica que se meten con facultades del Congreso. La renegociación de deuda es materia legislativa. No puede el Poder Ejecutivo auto-habilitarse a ofrecer canjes de deuda y hacerlo sin las pautas que el Congreso debe facultar.
El gobierno pretende renegociar sin ningún tipo de exigencia que evite empeorar las condiciones de endeudamiento de Argentina. Si bien está incluido en el proyecto de Ley de Presupuesto 2025, es prácticamente improbable que el Congreso lo apruebe.
Con respecto a la sesión convocada por diputados de Encuentro Federal, el radicalismo de Democracia por Siempre, Unión por la Patria y el santacruceño Sergio Acevedo, la misma se convocó para las 15 y antes, se reunirá la Comisión de Labor Parlamentaria para organizar el desarrollo de la misma.
Allí, hasta el momento del cierre de este editorial, los diputados aliados se silenciaban para no admitir que no creen en La Libertad Avanza. Si fuera por el PRO, hoy por hoy la mayoría prefiere la abstención. Otros prefieren, mas allá de la exposición mediática, ausentarse de la misma.
Si bien el que habla con Martín Menem, es Cristian Ritondo, la definición final saldría de la negociación entre Mauricio Macri y Santiago Caputo. Macri cree que es la última oportunidad para hacerse valer y lograr un mayor porcentaje en una posible alianza para ir en listas conjuntas el año próximo.
Desde La Libertad Avanza, muchos creen que de nuevo habría que poner la zanahoria para obtener los votos de los “87 héroes”, y que total sobra el tiempo para ejecutar la jugada en donde los dejarán fuera de todo. El clima está enrarecido. La reunión que realizaba los lunes el gobierno con los bloques aliados, hasta hoy estaban suspendidas.
Uno de los diputados que asisten habitualmente dice: “Creemos que el lunes van a llamar. El tema a resolver, es si vamos a ir”.
Si fuera por varios diputados del PRO, mas algunos aliados, el martes votarían en contra del gobierno. Por ahora eso no pasará. La contención sigue siendo Cristian Ritondo.
El jefe de bloque del partido amarillo, no tolera que en la misma mesa, ahora lo sienten a Rodrigo De Loredo junto a los 5 radicales con peluca. En la reunión que tuvo el ex presidente Macri con sus diputados, les dijo que el que mas quiere el acuerdo electoral con el PRO, es el mismo Milei. No así, Santiago Caputo y la Secretaria General de la Presidencia, Karina Milei.
Ritondo habló con Martín Menem, y le trató de hacer entender que la única forma de ganar la madre de todas las batallas (Provincia de Buenos Aires), es con listas conjuntas. Ya es hora de empezar a hablar del armado electoral.
Hasta hoy, los encargados de juntar los votos por la oposición para la sesión del martes, hablaban de 5 diputados mas que los que se necesitan para conseguir el quórum para habilitar la sesión. Serían 134.
Por ahora se pararon las negociaciones por el presupuesto 2025, que el Gobierno tenía intención de cerrar con los gobernadores que se juntaron con el Presidente. El tema pasaba por el reconocimiento de las obras que se habían pactado de antemano y el gobierno no estaría ejecutando.
Desde el gobierno, un ministro afirma: “Si la oposición saca adelante la sesión de los DNU, se puede llegar a prorrogar el presupuesto del 23′, y las partidas quedarán totalmente desactualizadas”.
Mientras tanto Cristina, proclamada presidenta del PJ, comienza a moverse como tal. Esta semana otra vez se volverá a hablar de lawfare. La Cámara Federal de Casación Penal dará a conocer la sentencia contra Cristina Kirchner en la causa conocida como “Vialidad”.
El fallo, por la información que ha trascendido desde tribunales, va a salir condenatorio. Desde el cristinismo piensan que la intención de la proscripción merodea las cabezas de muchos, y no ven como imposible que la Corte, pueda confirmar el fallo antes de fin de año.
Por ahora, La Libertad Avanza, cajonea el proyecto de ficha limpia impulsado por el PRO. ¿Existe un acuerdo entre Milei y Cristina para que eso no prospere, a cambio del nombramiento de jueces federales, de los procuradores, y hasta del mismo Lijo?
Mientras tanto, el próximo martes va a haber una clase pública en Tribunales, a la espera del fallo. Allí van a estar Juan Martín Mena, uno de los operadores judiciales de la ex presidenta. También van a estar Grabois y dirigentes cercanos a Lula Da Silva, quien estuvo preso por el denominado Lavajato.
La expresidenta sigue rodeada por los dirigentes mas cercanos, aunque muchos que se habían distanciado, hoy vuelven a mostrarse.
Cristina juega en tándem con Sergio Massa, aunque éste por ahora crea que no sea momento de aparecer. El ex ministro de economía envió la semana pasada a Guillermo Michell ex titular de la Aduana y al entrerriano Gustavo Bordet.
Massa quiere una revancha, y estudia la posibilidad de presentarse como candidato. El ex candidato a presidente también tiene línea directa con Kicillof.
El bonaerense está en un cuello de botella que pareciera no tener salida. Cristina volvió a hablar de la importancia del dedo. En su lógica no entra la de negociación en partes iguales. En todo caso es la rendición para conseguir algo. Milei también utiliza esa lógica.
El gobernador de la Provincia lo sabe, e intentará negociar. Esta semana, aunque hubo mucha tensión, Larroque y Mayra Mendoza se mostraron en un acto conjunto. Podría ser el principio de la salida del “freezer” de la relación.
Quintela quiere una línea interna para pelear espacios, sobre todo en las provincias. Esa es la pelea que Cristina tendrá en los distritos donde aún quedan peronistas.
Osvaldo Jaldo de Tucumán, Gustavo Sáenz de Salta, Hugo Passalacqua de de Misiones y el exmandatario de San Luis Alberto Rodríguez Saá apoyan al riojano. Claudio Vidal de Santa Cruz y Martín Llaryora de Córdoba están expectantes.
Corrientes y Santiago del Estero eligen gobernador en 2025 ya que en su momento sufrieron intervenciones federales y quedaron con el calendario al revés. La Libertad Avanza participará en ambas provincias con candidatos propios que cuentan con el apoyo desde la Casa Rosada y el Congreso de la Nación. Ellos son el correntino Lisandro Almirón y el santiagueño Tomás Figueroa.
Del lado oficialista, el gobernador correntino Gustavo Valdés, intentará imponer a su hermano Juan Pablo, y en Santiago aún no está definido.
Finalmente, en la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri teme por lo que pueda suceder en las elecciones legislativas del 2025. Por primera vez, el PRO ve peligrar su territorio.
Para eso, Jorge Macri, le encargó al Ministro de Justicia Gabino Tapia, que estudie la posibilidad de una reforma constitucional para achicar la estructura de la Ciudad. Esto debería hacerse antes del año próximo. Los tiempos parecen exiguos.
Macri quiere capitalizar este tema, ya que la presentación por parte de la legisladora Pilar Ramírez, que responde directamente a Karina Milei, con un proyecto de Ley Bases local, generó mucho ruido en las entrañas del Gobierno de la Ciudad.
Al igual que le pasa al presidente de la Nación, el jefe de gobierno necesita garantizar el quórum en la legislatura para poder sacar las leyes que pretende.
Para eso se necesitaría convocar a una constituyente, con todo lo que eso significa. El tema está en estudio y las reuniones cada vez son mas asiduas.
Proyectos como reducir de 7 comuneros a que haya un triunvirato por cada una de las 15 comunas, es uno de los temas que se discuten. El otro tiene que ver, al igual que como pasa en la provincia de Buenos Aires, que se elijan los legisladores por comunas.